October 26, 2017 / By Elperiodico.com
Corresponsales y responsables de medios comunicación públicos iberoamericanos analizaron hoy en Madrid los modelos de gestión de sus empresas, en una época donde las nuevas tecnologías y la inmediatez de la información se han convertido en los nuevos restos de mercado.
Frente al dinamismo de las redes sociales, algunos medios de comunicación tradicionales apuestan por mantener los mismo criterios éticos que antaño y seguir dando un servicio público a los ciudadanos, “cada vez más exigente en cuanto a la diversidad de los contenidos”.
Así lo expuso Max Seltz, editor multimedia de BBC Mundo, durante su intervención en el coloquio organizado por la Casa de América, en colaboración con el IE Bussines School, dentro del V Encuentro Anual de Corresponsales y Agregados de Prensa Iberoamericanos que se celebró hoy en la capital española.
Frente a la necesidad de obtener un mayor número de “likes” en sus contenidos digitales, Seltz explicó que su empresa ha optado por la diversidad de temas como la ciencia o la educación, “siempre elaborados dentro de los límites de la calidad”.
“El código ético de la BBC plantea casi todos los escenarios y se va actualizando de acuerdo a los distintos formatos, pero se mantiene más allá de como vaya cambiando el mercado. En el fondo son principios fundamentales de ética periodística”, dijo.
Según Seltz, la gente sigue teniendo la necesidad de entender el fondo de las situaciones, de lo que está pasando, aunque todo se desarrolle en un momento de rapidez informativa, de inmediatez. Más allá del bombardeo sigue existiendo la necesidad de entender”.
Para el periodista de BBC Mundo, la principal diferencia entre los medios púbicos y los privados es que, mientras para éstos últimos su mayor preocupación es la audiencia, los números, lo que vendan, los públicos siguen pudiendo apostar por contenidos que no necesariamente tengan que ser populares en un principio”.
Una apuesta que en los países latinoamericanos no es tan sencilla ya que, según Seltz, que fue corresponsal en Argentina, en esa región “hay estados a los que les cuesta mucho desprenderse de sus medios”.
Mantenerse en un mercado cada vez más dominados por los grandes grupos de comunicación privados es el objetivo de la Televisión Nacional de Chile, un modelo único en América Latina ya que se financia exclusivamente de los ingresos por publicidad.
Hernán Triviño, su gerente general, explicó la evolución del canal chileno que tiene como normas fundamentales el pluralismo en la información, la integración nacional, el reflejo de la multiculturalidad del país y ser relevantes informativamente.
“No somos neutros, somos independientes”, dijo Triviño quien indicó que en la actualidad en Chile se está planteando la necesidad de tener o no una televisión pública.
Esa es una discusión que ha llegado hasta el Senado chileno, donde los responsables del canal debaten ahora la posibilidad de recibir una ayuda estatal para poder mantenerse frente a la competencia privada.
“El reto es seguir siendo competitivo manteniendo el servicio público y mantener la masividad, si se pierde, la televisión pública deja de tener sentido”, afirmó.
Según Triviño, “los medios públicos van a existir en la medida que el público quieran que existan. ¿Cómo hacer para seguir sintonizando con esa misión pública que se nos impuso, ese es el dilema”.
Finalmente, el director de la agencia mexicana de noticias “Notimex”, Alejandro Ramos, se refirió a los grandes retos que plantea la nueva era digital para las empresas como las suyas.
Ramos, cuya intervención estuvo introducida por el director de información de la Agencia Efe, Emilio Crespo, aseguró que la mayoría de los medios en América Latina todavía no se han adaptado a los nuevos formatos y tecnologías.
“El reto y la incertidumbre es que cada vez en el mundo hay menos lectores de periódicos, o que ven televisión o escuchan la radio tradicional. Los periódicos quedan obsoletos y tienen que cumplir otro papel. lo digital es un enorme apoyo, pero hay que conocer estas herramientas”, dijo.
En ese sentido admitió que la era digital representa oportunidades y retos para todas las empresas periodísticas “públicas o privadas”.
“Pero los principios del periodismo no tienen que cambiar. Las redes sociales no son buenas para informar porque no es información verificada, muchas veces es inexacta o es falsa. Eso obliga a tener un mayor rigor, claridad y compromiso con la verdad para dar un servicio a la sociedad”, aseveró.
Según Ramos, el problema actual es que no existe un nuevo modelo de negocio económicamente sostenible que se adapte al nuevo rumbo de la comunicación.